miércoles, 18 de enero de 2012

LOS PINSAPARES DE RONDA


Ruta A Los Píspales de Ronda
Las cañadas de Las Ánimas y del Cuerno
Sábado 14 de enero de 2012

Salimos de Ronda Juan Carlos, Juan y Yo en mi coche a las 08:30 horas en dirección al restaurante La Parrilla donde hicimos una parada para desayunar con café y una impresionante tostada con aceite de oliva y ajo, en cafetería nos encontramos con dos compañeros de ruta que nos invitaron a realizar el trayecto en su coche todoterreno, así que deje mi coche aparcado y nos fuimos con ellos. Nos ponemos en marcha por la carretera A-473 en dirección a San Pedro de Alcántara, a unos 13 Km. encontramos un cartel que indica Parque Natural Sierra de las Nieves, tomamos el desvió a la izquierda, tomamos el carril y atentos siempre a las indicaciones que pone Quejigales, sin pérdida llegamos a las explanadas del Área Recreativa de los Quejigales en este lugar aviamos quedado a las 10:00 horas las 50 personas del grupo,






































después de pasar lista y comprobar que estábamos todos. Iniciamos la ruta por el carril del Sabinar, situado junto a la zona de barbacoas;















































por nuestra derecha discurre el arroyo de Carboneras, cerca del comienzo dejamos hacia el Este la senda que se dirige a la Cañada del Cuerno; pasamos junto a una balsa contraincendios y llega un momento en que el carril se divide en dos, a la izquierda continua hasta El Sabinar, nosotros seguimos por el de la derecha que pasa junto a la Fuente del Pinar, popularmente conocida como de "Molina", a la derecha de la fuente se encuentran las ruinas de la choza de este guarda y una placa de reconocimiento a la labor de Frasquito colocada hace unos años por Medio Ambiente y la Asociación Senderista Pasos Largos.



























Estamos a unos dos Km del Refugio. El carril termina cuando nos topamos con la zona baja de la Cañada de Emedio, desde ahora seguimos por una senda bien marcada;

























en algunas zonas podemos comprobar cómo la erosión está dejando a los pinsapos con las raíces al desnudo.


























El pinsapar empieza a ser más espeso, tras encontrar la primera bifurcación del camino señalada con un hito de piedras junto a un gran pinsapo, tomamos la de la derecha que se dirige a la Cañada de las Animas; ya que la otra, por la izquierda inicia una bajada que nos llevará a los Hoyos de la Caridad.


























En esta zona los pinsapos alcanzan una altura y grosor considerable; al fondo vemos la inconfundible silueta del Peñón de los Enamorados y más abajo el Tajo del Canalizo.


























El camino asciende entre un magnífico pinsapar, hemos de tener cuidado en no tomar algunos que salen lateralmente al principal, el nuestro es en continua subida y acaba en el Puerto del Oso,
























junto a un gran nevero reconstruido de grandes dimensiones en el año 1.997. Nos permite hacernos una idea de la importancia que esta actividad tuvo en la Sierra de La Nieve hasta el año 1.931 que desaparecieron las últimas explotaciones de nieve.

























Se estima que el nevero tenía una profundidad de cinco metros más que la actualidad. En este momento habremos recorrido unos 7 kilómetros y medio.
Estamos en la Meseta de Quejigales donde son relativamente abundantes los quejigos de montaña.
























Tras dejar atrás el nevero encontramos un camino que hemos de seguir por la izquierda. Hemos de estar atentos ya que el camino cerca de Cerro Bernardo se bifurca, por la izquierda parte la senda de Enamorados que se dirige al Peñón del mismo nombre.

























Son característicos los abundantes vallados que se ven por toda la zona, por medio de ellos se intenta la regeneración de la vegetación en el páramo alto de la sierra y sobre todo del quejigo de montaña muy castigado por ovejas y cabras domesticas. Continuamos andando un tramo para acercarnos hasta Sima Honda, se bajó su único pozo con la ayuda de un torno, tocando fondo a -137 metros, comprobándose la imposibilidad de continuidad.

























Aunque esta sima con el paso de los años ha quedado algo olvidada a favor de sus vecinas hermanas mayores, Sima GESM, Sima del Aire y Sima Presta, no podemos olvidar que hubo un tiempo en que los ojos de los espeleólogos malagueños estuvieron dirigidos hacia ella. Hoy día sigue valiendo la pena bajar su impresionante pozo en forma de campana...
























Después un breve descanso nos ponemos de nuevo en marcha por el sendero y después de un suave descenso, se abre a nuestros ojos una zona llana salpicada de torcas llamada los Hoyos del Pilar, en una de las hoyas se encuentra sima G.E.S.M.

























la tercera más profunda del planeta que ha traído desde su descubrimiento gran número de expediciones espeleológicas de varias nacionalidades, habiéndose llegado hasta la fecha a la cota 1.098 m de abismo. En el interior de la cima existen algunas formaciones de gran dificultad técnica como el Gran Pozo de 115 m. de caída vertical y el pozo Paco de la Torre de 195 m. Otras como la Sala de las Maravillas a 900 m. de profundidad o el Lago Ere, casi en el fondo conocido de la sima, han asombrado por su belleza a expertos espeleólogos de todo el mundo.

























Después de realizar las fotos de rigor continuamos hacia un llano cercano donde decidimos parar para el almuerzo y descansar un poco ya que la jornada ha sido dura por la gran subida continuada de la cañada, una vez finalizado el almuerzo nos colocamos nuestras mochilas y tomamos dirección hacia el Puerto de los Pilones situado a 1.750 metros de altitud, desde aquí se puede ver Málaga y toda la Costa en días claros, hoy ocurre todo lo contrario las nubes bajas y espesas existentes no nos deja ver nada a pocos metros de distancia,































después de una pequeña parada para agruparnos, continuamos por el camino de Los Pilones para tomar a la derecha el sendero de La Cañada del Cuerno que desciende en zig-zag y recorre en escasos 3 kilómetros un desnivel de 500 metros, nos introduce en un bosque de pinsapar muy viejo, de formas retorcidas y extrañas.



























El descenso por la cañada es algo duro, pero la belleza que lo rodea merece la pena. El bosque de viejos pinsapos acumula en sus retorcidas y oscuras cortezas el brillante musgo




































de un verde luminoso a pesar de loumbrio. finalizamos la ruta en El Cortijo de Quejigales.